Submit your work, meet writers and drop the ads. Become a member
O ano de 2020 é um restauro. Combinação exponencial do algoritmo máximo duplicado e zerado. Porém são números espero que errados. Nada alterou nestes últimos tempos a não ser a fórmula biológica que acrescentou ruína. Publicamente a verdade, voltou-se a economia bélica pra área da necessidade. Só se para quem o diz. Impossível compreender o homem!
Enfim, ou eu sou burro cego ou surdo que não entendo a serenidade na resolução do problema. A política nua e crua, pelo menos a política que até aqui conhecemos. Surgiu uma doença séria com consequências nefastas e o combate há doença? Duas tragédias juntas!
Os países caminham para uma destruição previsível.
Apocalipse de quê. Por desaparecer o que não faz falta ao mundo, tudo iria acabar e escondiam tudo numa caixinha debaixo da cama. O homem é semelhante a si mesmo, nada têm de divino. O dito Deus que se conste não vive observado por dinheiro ou coisas bélicas. As profecias também dizem que o Alfa e o Omega, fizeram este mundo e não teve início nem terá fim. Supomos que estamos a meio.
Era óptimo que o homem na sua existência virasse a sua inteligência para a sua fragilidade desde início.
Destruíram escolas, hospitais, quartéis e serviços públicos, isolaram os contribuintes de primeira dos contribuintes do fundo. Existe Portugal do Oeste e o Portugal de Leste. No meio uma papa de arroz 🍚 com água fervida. No combate há guerra soltaram abelhas biológicas sem rainha. Temos rainha? por quanto tempo? A caça à colmeia começará depois. Unidades militares a socorrer civis. Bravo. E os hospitais privados socorrerão os militares? Talvez não seja preciso. Deixem de ser betinhos e assumam a condição de Homens. Afinal como me dizia um amigo: As prisões foram feitas pros Homens assim como esta arma biológica, ou não é de interesse resolver o problema.
À democracia do momento exige-se regidez e a meu ver que nada invejo na política averdadeira democracia têm regras a esta pátria a quem devemos a vida. Pensem senhores se é que ainda vamos a tempo.
Autor: António Benigno
Código de Autor: 2020.03.25.23.08.03.01
Jesus 1d
¿ Y si no estoy vivo,
y solo soy parte de un juego,
al que juega un niño alienígena de
una civilización superior?.


Siendo él desde el otro lado,
el que va incitando mi presente,
y todo lo que hago y hay
a mi alrededor no existe.


¿ Y solo soy un conejillo
de indias, que tiene establecidas y predeterminadas,
todas sus funciones, estatus social,
cosas que hacer
y también su rol?.


Mientras el niño desde el
otro lado , va dándole a
las teclas del juego, desde
un lugar imposible
de saber, de esa civilización superior:


Desde el mismo día de mi
nacimiento, hasta el aquí
y el ahora de hoy.


¿ Y si me acabo de dar cuenta
de esto ahora mismo,
y en realidad no soy yo ?.


Si esto es así,
he sido capaz de salir del juego
despertando a él.

Hacia una nueva ruta y parte
del engranaje,
creada por mí mismo
y no por el ordenador.


Por lo que el niño alienígena
que juega conmigo,
de esa civilización superior.


Y el mismo creador del juego,
en el que participo yo.

¡ Qué no es otro que el propio
niño ya mayor!, desde otro tiempo
más avanzado y en otra dimensión,
de su propia civilización.


Siendo un alto
representante estelar,
de todo tiempo,
espacio, universo y lugar.



Tienen un gran problema,
y a la vez una excelente
solución.

Para que este juego vaya a más
y a mejor, ya que estando
plenamente despierto, consciente
y pasando a la acción:


Me toca ir moviendo mis propias
fichas, desde esta nueva
posición.


Para ir avanzando
en el juego y que el mismo
vaya a más,
escalón a escalón.


Y así, de esa manera,
! qué el niño alienígena,
se lo pase mucho mejor!.


Ya que al ser el juego
controlado por los dos,
más equitativo este,
más difícil para él,
y también más entretenido
y mejor.


¡ Dándole más
calidad al mismo,
y reflexión a su creador!.


Para que lo haga más
equilibrado, más armonioso,
y con más acción.


Siendo de esa manera, el juego más
abierto, profundo, complejo,
¡ y también mucho mejor!.


Tanto para el niño alienígena,
este que soy yo,
¡ y también para su creador!.


Y por todo lo anterior,
aquí y ahora mismo queda
escrita esta reflexión,
que seguro le sirve de algo
a todo lo anterior.


" No todo lo que parece
es lo que es, como no todo lo que
se piensa, es lo que
se hace también..

¿ quién ha escrito el
algoritmo, mi energía o yo?.

— The End —