Submit your work, meet writers and drop the ads. Become a member
Douro terra onde tudo vive


No poente alaranjado
arde o céu sobre as vinhas
e as cigarras parecem minhas,
Neste meu Douro dourado.

Formigas cruzam caminhos de pedra xistosa,
carregando alegria da bela mimosa.
Abelhas embriagam-se no néctar adocicado
das flores que o vento esqueceu.
Borboletas cartas aladas dos deuses
pousam breves nos versos meus.
sobre a pele quente da colheita.

Oliveiras que enfeitam as encostas
guardam segredos de enxadas às costas.
raízes que se entrelaçam
com ossos de meus antepassados
Douro dos serões embriagados.

Cada videira com
Seu  tronco retorcido,
é oração sem palavras,
escavada pela fé de quem aqui tenha nascido.
Homens de valor com paixão  por
mulheres de lenço de eterno pranto
no silêncio da paisagem encontro Douro e meu lamento.


O rio,
essa serpente de prata e memória,
leva nas suas águas
o reflexo do céu e da aurora
É nascente e poente,
vida que vai e regressa
no ciclo eterno de todo o sempre.

E quando o sol mergulha
no ventre da desta santa Terra.
Ela  canta baixinho
uma canção no cume da serra.


O Douro é mais do que lugar.
É pulso.
É respiração da terra.
É a poesia que ainda não foi escrita,
mas que já vive
em cada uva, em cada impulso.
Em cada abraço apertado que dou à minha gente,
em cada olhar que ama
sem saber porquê
apenas porque sente.


Victor Marques
Leo 3d
La gente dice que todos tenemos uno al lado izquierdo,
pero hace tiempo que no siento.
No siento un molesto alarido,
una mueca de felicidad,
un mínimo de armonía,
ese escalofrío que fluye por el cuerpo y alma
como un yacimiento de agua descendiendo por lo alto de una montaña,
cuando verdaderamente se ama.

No busco en la izquierda,
porque sé que no está.
Que lo perdí de vista,
que huyó sin remordimiento,
que fue un cobarde.
Que, si fueran otros tiempos,
sería carente de honor a más no poder.

Intento encontrar algo que me haga sentir;
busco dentro y fuera de mí.
Sentir que es posible vivir sin eso a la izquierda.
Y reviso todo con esperanza,
porque, si vivir sin corazón es como morir sin haber existido…
cómo estoy viviendo?
Te elegí.
Y no fue casual.
Ni por falta.
Ni por costumbre.
Fue porque eras tú.
Y nadie más.

Te elegí cuando caminabas como un potro salvaje,
ágil, veloz, como si volaras por el mundo sin darte cuenta,
con esa fuerza desbordada que no pedía permiso
y que a mí me dejaba sin palabras.
Te miraba moverte y no sabía si quería alcanzarte…
o simplemente contemplarte.

Y también te elegí cuando el tiempo te volvió más hombre,
más contenido, más claro.
Cuando ya no corrías como antes,
pero brillabas distinto.
Te volviste un sol maduro:
menos impulso, más sentido.
Luz que no arde, pero acompaña.
Eras presencia serena,
conciencia que ya entendía de deberes y pausas,
y aún así, seguías siendo tú.
Más sabio. Más completo.

Te elegí también por tu aroma,
masculino, profundo, como a sándalo.
Ese olor que no se olvida,
que parecía nacer de tu piel,
y que a mí me daban ganas de respirar más de cerca,
como si al abrazarte pudiera empaparme de ti,
llenarme de eso que eras…
y quedarme así un instante más.

Estar contigo era sentir que lo ordinario podía ser maravilloso.
Las cosas simples —una conversación tranquila, verte trabajar,
un momento en silencio, el cruce de una mirada—
tenían un brillo distinto si tú estabas cerca.
Había una paz suave, una alegría callada,
como si el mundo se hiciera más habitable solo porque tú lo habitabas también.

Incluso un almuerzo preparado por ti —con esos sabores sencillos,
con tus manos midiendo sin reglas pero con cariño—
tenía algo especial.
Era alimento, pero también era gesto, era casa.
Y yo me quedaba ahí,
queriendo quedarme más.

Te elegí porque me hacías reír, pensar, dudar, aprender.
Porque podíamos hablar de lo importante…
y aunque no siempre fuera fácil,
buscabas entender.

Y a veces, ni siquiera hacía falta que estuvieras cerca.
Con solo verte un instante,
escuchar una palabra de tu voz,
o recibir un simple mensaje tuyo…
todo cambiaba.

Los problemas se deshacían sin explicación.
El mundo se teñía de rosa,
y el día, por gris que fuera, se volvía más claro,
como si tu presencia —aunque lejana—
pudiera encender la luz de todo.

Te elegí también por lo que me inspirabas sin saberlo.
Había momentos en los que te ponías nervioso,
cuando algo no salía como esperabas
y una sombra de vergüenza pasaba por tu rostro.
Pero a mí, eso no me alejaba…
me desbordaba de ternura.

Quería abrazarte, cubrirte con calma,
decirte sin palabras que estabas bien,
que yo te quería así, con todo.
Y a veces, esa ternura —tan limpia, tan honda—
se transformaba sin aviso.

Como llama que crece desde una brasa pequeña,
mi cuerpo también respondía.
No era solo ternura. Era deseo que sabía esperar.
Un querer acercarme no solo al alma…
sino también a tu piel.

Mi deseo por ti era completo y secreto.
Vivía en mi piel, en mi respiración,
en el impulso de abrazarte más tiempo del que se permite.

En la forma en que imaginaba quedarme contigo,
recostada en tu pecho,
mientras tus manos me acariciaban
como si supieran exactamente dónde nacía la emoción.

Haciéndome sentir tanto,
que dolía un poco…
como duelen las cosas hermosas
cuando son demasiado verdaderas.

Te deseé en silencio,
con ternura y con fuerza.
Quise desnudarte el alma…
y también el cuerpo.

Quise abrazarte sin prudencia,
besar tus dudas,
deshacer tu calma.
Te amaba también así.

Desde lo físico.
Desde lo más humano.
Desde donde el amor también arde.
Te elegí porque, sin querer, me inspirabas a ser mejor.

Porque eras tú:
sencillo y complejo,
fuerte y sensible.

Con una voz que, cuando hablaba con verdad,
aún podía enamorarme.

Te elegí por la forma en que mirabas,
por los puentes que sabías crear con tus palabras,
por el juego honesto de conocerse.
Por cómo cuidabas lo que no sabías decir.

Y sí…
Te elegí entonces,
y si pudiera elegir otra vez,
volvería a hacerlo.

No porque te idealice.
No porque no haya otro camino.

Sino porque aún hoy,
con todo lo que sé,
con todo lo vivido,
con todo lo que ya no es…
Sigues siendo tú.
Leo Jul 26
Se quejan,
y ni después de ser víctimas
del asesino más cruel
dejan su egoísmo,
su victimización.

Solo saben quejarse;
quejarse de todo,
quejarse de la falta,
quejarse del amor.

Se quejan,
mientras todo lo que anhelamos
nos espera a la derecha
o nos grita silenciosamente a la izquierda.

Pero por egoísmo,
por mantener la cabeza recta, en alto,
somos victimarios.
Indiferentes.

Indiferentes a nuestra salvación,
a la salvación de alguien más.

Alguien que quizás no se victimiza,
pero que, por seguir recto,
se victimizará.
At Last:

The day's end has come,
let's head back home.
To receive hugs,
let's give those kisses,
it's today's celebration.

The day concluded,
caresses arrive,
in the sweet home.
With so much love,
amidst the fire,
in your home,
the coolness,
of the breeze,
of love.

Welcome,
to your house,
with love,
to enjoy,
it's the party,
of life.

It's the family,
with the children,
with your friends,
in well-being.
That is happiness,
enjoy the home,
and life will smile upon you,
in sweet love.

In the home,
of fire,
of living,
warm,
life,
with
cold
and
heat.

"Yes, life is simple… but it can also be fabulous."
July 23, 2025
Sangue dos Meus Antepassados Douro  sublime


Do barro quente nas mãos da avô,
brotava o suor bênção feita em pó.
Era a terra quem mandava, sim senhor,
com honra, com dor, com verdade e amor.


Sol tórrido das tardes de julho a arder,
o canto das cigarras fazia-me adormecer.
E os meus olhos ardiam a ver o poente,
como quem espera que  Deus salve o não crente.

Videiras, raízes, troncos calados,
sobreiros velhos, zimbros cansados.
Homens duros como a cepa da Touriga,
Inanimados com tanta fadiga.




Mulheres firmes, ousadas, sem igual,
como pedras do lagar tradicional.
Nos lagares, a alma pisa a vida,
e o tempo esquece qualquer ferida.


Torradas feitas em lareiras do passado,
azeite espesso, denso, abençoado.
Ai, figos secos da infância sentida,
deixai o Douro ser sonho e ser vida.

Este Douro, meu sangue, minha alvorada minha terna saudade.
É berço dos homens com verdade,
dos que lavram, suam, cantam em liberdade,
E sepultados serão nas vinhas da eternidade



Victor Marques
Douro Valley
si alguna vez, te pierdo,
o si te me pierdes,
espero acordarme
de tus cuerdas hipnotizantes.

de tus notas hipnóticas,
tus resonancias disonantes,
y tus harmonías etéreas
que calman mi miseria
al igual también, mi amor.

espero acordarme de
absolutamente todo.
el momento malo
al igual que el bueno.

esperando nuestro amor humano
que esté, a través de su divinidad,
lleno y repleto del río rojo
que sale de este lugar mágico,
como el jardín de Adan y Eva.

aquí contigo en este río.

me encontrarás entre sus piedras,
dónde te esperare con mis pies en el agua
y entre tus tiernas piernas sembrare
mi orgullo final.

un final grande y grave,
como tu nota musical
en su fin orquestal.

el estar contigo,
es un bienestar al olvido
de sufrimientos vividos,
tu voz, al estar en mi oído,
lava el odio del niño
tenido del nido,
y en sus alas hay hilos
reviviendo los dones dormidos.

reviviendo mis sentimientos
hacia una vida buena,
y el poder de volar.

el poder de vivir,
y el privilegio de poder
compartirme contigo
sin tener que fingir.

- melancholicreator
aquí contigo en este río
Miro al cielo y pido con tanta desperación;
Que me permita echar otro vistazo;
Anhelo tener otra conversación;
Déjame verte respirar, sonreír y vivir como te amo.
Leo Jul 9
vivir es extraño
solo a veces siento tener vida.
será que esa luz está en mí?
o solo es un reflejo?
quizás hay formas de vivir.
por ejemplo, cuando yo me siento vivo
es cuando la veo:
veo sus ojos, su esencia,
su todo,
que me hacen vivir pensando,
imaginando,
o incluso, simple y extrañamente,
vivir.
será que ella es mi sol?
y si me estoy mintiendo?
quizás no hay tanta vida, tanta luz en ella.
quizás me engaño
para sentir,
sentir un reflejo lejano
de lo que, en verdad,
es estar vivo.
Dedicatoria a meus queridos Pais: António e Maria

Mão forte na terra, coração de calma,
António o vinho da alma.
Partiu cedo, mas deixou raiz,
Num campo onde o por do sol assim diz:
Há  amor no Douro,  há um nome com amor e brio,
Cantam pintassilgos ao desafio.

Mãe Maria doce como uma uva bem madura,
Ternura firme. Silêncio que cura.
Na sombra da vinha, na luz do seu olhar,
Seus filhos ela quer sempre amar...
Minha mãe,  do meu amor e sentir,
Nasceu este amor pelo vinho,
Sem eu nunca o pedir...

Victoria Marques o nome por mim escolhido,  
É nome de amor. Legado e fado.
Filha, teus avós :António e Maria tinham teu sonho guardado !
Um brinde à memória,  um beijo à terrra, e um brinde também a minha Filha Victoria.

Victor Marques
Douro Valley
Next page