Submit your work, meet writers and drop the ads. Become a member
2d
El dolor…
sí, duele.
Y no hay forma bonita de decirlo.
No hay metáfora que lo disimule
ni verso que lo endulce.
Duele.
Y punto.

Duele como cuando te caés
y nadie extiende la mano.
Duele como amar
y no ser correspondido.
Duele como crecer…
porque crecer siempre es perder algo.

Y vos te preguntás:
¿Por qué a mí?
¿Por qué ahora?
¿Por qué así?

Pero el dolor no responde.
Solo se queda,
como un huésped oscuro,
haciéndote compañía
cuando todos se van.

Te rompe.
Te parte.
Te deja solo
en medio de una tormenta que no sabías que llevabas dentro.

Pero entonces pasa algo.

Un día, entre tanta ruina,
te encontrás a vos mismo
juntando pedacitos.
Sin darte cuenta,
estás reconstruyéndote.

No como eras antes.
Sino más verdadero.
Más real.
Más vos.

Porque el dolor no viene a destruirte,
viene a despertarte.

A mostrarte quién sos
cuando ya no hay máscaras.
A revelarte lo que valés
cuando nadie te aplaude.
A enseñarte que no necesitás tanto
para ser todo.

Y ahí entendés:
el dolor duele mucho,
sí.
Pero enseña.

Te enseña a ser fuerte sin endurecerte.
A llorar sin avergonzarte.
A caer sin rendirte.

Te enseña a perdonar
a quien no pidió perdón,
a soltar lo que amabas,
a seguir aunque todo te grite que te detengas.

Te enseña que no todo vacío es malo,
que no toda herida es eterna,
que no todo lo que termina
es una pérdida.

El dolor…
te convierte en fuego,
en ceniza,
y en renacer.

Y vos, que pensabas que no ibas a poder,
te encontrás de pie,
con el alma un poco más arrugada,
pero mucho más sabia.

Porque al final de todo…
el dolor no te destruye.

Te revela.

Derechos de autor ©️

~Daniii
Daniii
Written by
Daniii  15/Uruguay
(15/Uruguay)   
Please log in to view and add comments on poems